Como todos los demás sectores, el de la docencia está atravesando momentos muy duros en este 2020 debido a la excepcional situación que ha provocado la COVID-19 globalmente: protocolos engorrosos pero necesarios, docencia virtual o híbrida… Un exigente proceso de readaptación que, pese a todo (o, más que nunca, justo por todo), no impedirá la celebración del Día Mundial de los Docentes el 5 de octubre, tal y como viene conmemorándose cada año desde 1994.
En la entrada de esta semana, vamos a proponerte una serie de consejos para que escribas sobre esta efeméride sin que te caiga un suspenso.
1. Mayúsculas en el nombre oficial: Es decir, se escribe “Día Mundial de los Docentes”, con mayúscula en todas las palabras significativas, dado que se trata del nombre “oficial” por el que se lo conoce. El artículo “el” antepuesto al nombre solo es necesario que lleve mayúscula inicial al inicio de frase; en los demás casos, siempre minúscula.
2. Unesco y Unicef: Al contrario de lo que muchos piensan, estos dos nombres no son siglas, sino acrónimos, y por lo tanto no deben escribirse con mayúscula en todas las letras, sino tan solo en la inicial. El primero refiere al Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (en inglés, United Nations Children’s Fund), mientras que el segundo refiere a la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura.
3. Lema entrecomillado: Cuando citemos el título del lema específico (este año, se trata de “Jóvenes docentes, el futuro de la profesión”), conviene entrecomillarlo poniendo en mayúscula solo la primera inicial. En cuanto a la comillas, a ser posible angulares, aunque en medios digitales también se admiten y son frecuentes las inglesas (no miramos a nadie…).
4. Ni maestro ni profesor… pero ambos docentes: Muchas personas confunden las palabras “maestro” y “profesor”, cuando lo cierto es que definen realidades muy distintas. Ambos son docentes, en efecto, pero, mientras el maestro enseña materias más generales a alumnos pequeños (clases de infantil, primaria y el primer ciclo de la ESO), el profesor se especializa en una materia concreta de secundaria, bachillerado u otras formaciones superiores. Así pues, no sería demasiado ortodoxo referirnos al Día Mundial de los Docentes como Día del Maestro (pues, en efecto, los maestros ya tienen su propia fecha de celebración específica, que varía entre países).
5. Docencia “online”: Dado que el término “online” se considera un anglicismo, lo apropiado es resaltarlo de algún modo (o bien cursiva, o bien comillas). Por otro lado, no resulta estrictamente necesario recurrir a tal palabra para referirnos a esta modalidad de educación a distancia, cuando podemos hablar de “en línea”.
6. ¿A distancia, virtual o en línea?: Mucho ojo con confundir “educación a distancia” (que no requiere conexión a Internet), “educación virtual” (que sí requiere conexión, pero no que docente y alumnos coincidan en el horario para una clase o tutoría mediante videollamada) y “educación ‘online’ o en línea” (que requiere todo: conexión y sincronicidad de horarios para videollamadas).
7. “La educación secundaria”, pero “Educación Secundaria Obligatoria”: Las denominaciones genéricas de etapas y ciclos educativos (educación secundaria o educación superior) se escriben con minúscula, pero pasan a mayúscula si se trata del nombre oficial, ya que en ese caso funciona como nombre propio: Educación Secundaria Obligatoria, Formación Profesional.