Con la Semana Santa a la vuelta de la esquina, parece un momento bastante apropiado para aproximarse al que sigue considerándose como el libro más leído de todos los tiempos (y, desde luego, uno de los textos más influyentes, si no el que más): la Biblia. El problema es que, por diversos motivos, quizá no resulte la lectura más apetecible para todo el mundo. Y por eso puede ser tan interesante una publicación como “Una biblia”, escrita por Philippe Lechermeier e ilustrada por Rébecca Dautremer.
Decimos escrita sin más, pero en realidad se trata de la adaptación de algunos de los pasajes originales que componen la Biblia. De hecho, una reescritura de diversas historias tanto del Antiguo como del Nuevo Testamento, con un estilo fresco y actual, y con un lenguaje mucho más contemporáneo, sin por ello dejar de respetar la esencia y profundidad de dichos relatos. Además, lo hace usando diversos formatos narrativos, desde poemas o canciones hasta piezas teatrales o incluso breves relatos narrados desde puntos de vista de lo más audaces.
Por otro lado, “Una biblia” no podría entenderse en toda su dimensión sin las ilustraciones de Rébecca Dautremer, que aportan un punto de vista posmoderno y rompedor que se integra perfectamente con el texto de Lechermeier. Una colorida combinación de estilos, culturas y épocas que juega con los anacronismos y con lo inesperado para ofrecer unas imágenes que, al igual que el propio texto, huyen de lo obvio (o, por lo menos, de lo ya visto) y pretenden sorprender al lector en cada página.
“Una biblia” está publicada por Edelvives y puede encontrarse en dos modalidades: o bien en un único libro que aúna la totalidad de la obra, o bien en dos ejemplares diferenciados en rústica que recogen, respectivamente, el Antiguo Testamento y el Nuevo Testamento.